28 sept 2011

Sueño y despertar: 2 de octubre día de la no-violencia




Retrocedemos en nuestro reloj de actividades y nos vamos a las siete de la tarde del 2 de octubre en la Plaza Callao. Para ese momento algunos amigos nos proponen un flashmove simbólico de "despertar", despertar de la conciencia, despertar de la no-violencia. Para ello nos invitan a traer un reloj despertador e incluso acudir en pijama. Sincronizaremos nuestras alarmas a las 7 de la tarde y tal vez a esa hora el ruido de los despertadores silencie por un momento los golpes del maltratador, los gritos desafiantes del opresor, las palizas de los torturadores, los silbidos de las balas, las calumnias de los desinformadores, las estridencias de los violentos, …

En los instantes previos nos tumbaremos en el suelo y fingiremos estar "dormidos", pero nada impedirá que durante ese tiempo uno sueñe. Entonces, el sonar de las alarmas marcará el despertar de un dulce sueño que guarda la esperanza de una nueva realidad.

¿Cuál será tu sueño?

El 28 de agosto de 1963, un activista de la no-violencia proclamaba insistentemente "Tengo un sueño" en un discurso durante la Marcha a Washington por Trabajos y por la Libertad. Martin Luther King decía entonces: "¡Hoy yo tengo un sueno! Yo tengo un sueño que un día en Alabama, con sus racistas viciosos, con su Governador con sus labios goteando palabras de interposición y nulificación, un día allí en Alabama los pequeños negros, niños y niñas, podrán unir las manos con pequeños blancos, niños y niñas, como hermanos y hermanas."

En nuestros días al decir "estamos dormidos" quizá haga referencia a que durante mucho tiempo la tiranía del dinero nos ha encandilado con sus cuentos. Nos han hecho creer una realidad inhumana, nos han hecho creer una ficción que ha terminado por encadenarnos. 'Despertar', entonces, puede significar que la caída de un determinado sistema de creencias puede mostrar otra realidad.

Para terminar hoy, dejamos aquí las despertadoras palabras del poeta León Felipe:
"…No me contéis más cuentos. / Contad / y recontadme este sueño. /
Romped, / rompedme los espejos. / Deshacedme los estanques, / los lazos, / 
los anillos, / los cercos, / las redes, / las trampas / y todos los caminos paralelos. /
Que no quiero, / que no quiero, / que no quiero, / que no quiero / que me arrullen con cuentos…"